Las crisis de ansiedad

La mayoría de nosotros hemos sufrido algún síntoma de ansiedad a lo largo de la vida. Presentarse a un examen con el "estómago cerrado", no poder dormir por la noche por culpa de un tema que no podemos dejar de pensar, o sentir taquicardias y falta de aire ante una entrevista de trabajo. 

El problema viene cuando todos estos síntomas se unen en un cuadro que empieza a  presentarse sin desencadenante o razón aparente, y que, además, se repite a lo largo del tiempo. Es entonces cuando empezamos a tener miedo de perder el control o a volvernos locos, o cuando vamos examinando constantemente nuestras reacciones corporales, a la espera de la temida crisis. 

Si te sientes identificado con estas sensaciones, sigue leyendo. Es posible que sufras un Trastorno de Ansiedad. 

¿Por qué me pasa esto?

La interpretación de nuestras sensaciones corporales son la base del problema. 

Ante una situación amenazante o preocupante, es normal sentir un poco de ansiedad (la ansiedad nos activa para responder con más rapidez y precisión). Esta ansiedad producirá algunas sensaciones como una respiración acelerada, aumento del pulso, o sudoración. Podría quedarse ahí y no transcendería más. Por ejemplo, si yo ante una entrevista de trabajo siento un poco de ansiedad y me digo a mí mismo o misma " es normal, a cualquiera le pasaría, ya se me pasará", lo más probable es que el episodio pase sin más trascendencia.

El problema viene cuando ante las sensaciones corporales me preocupo por ellas. "Algo terrible me está sucediendo" "Me va dar un infarto" "Voy a desmayarme o a morirme" son algunos de los pensamientos que pueden aparecer y que son generadores de aún más ansiedad. El resultado es un bucle que culmina cuando hiperventilamos y que desencadena 10 minutos fatales que llamamos "crisis de ansiedad". 

Los síntomas de una crisis de ansiedad

1. Palpitaciones, sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardiaca.

2. Sudoración. 

3. Temblores o sacudidas. 

4. Sensación de ahogo o falta de aliento.

5. Opresión o malestar en el pecho. 

6. Sensación de atragantarse.

7. Náuseas o molestias abdominales. 

8. Inestabilidad, mareo o desmayo.

9. Sensación de irrealidad (desrealización) o de estar separado de uno mismo (despersonalización).

10. Miedo a perder el control o volverse loco.

11. Miedo a morir.

12. Sensación de entumecimiento u hormigueo. 

13. Escalofríos o sofoco. 


Se requieren al menos 4 de estos síntomas para hablar de crisis de ansiedad. Si no se cumplen 4 pero hay malestar, hablamos de crisis de síntomas limitados, pseudocrisis o crisis parcial de ansiedad. 

El tratamiento psicológico

El enfoque más respaldado hasta la fecha sigue siendo el cognitivo- conductual. Lo ideal es que un paquete de tratamiento convine al menos tres aspectos: 


- entrenamientos en relajación

- exposición graduada

- reestructuración cognitiva de pensamientos generadores de ansiedad


Otras técnicas de resultados prometedores, aunque aún no con eficacia demostrada, son el mildfulness o la intención paradójica (generar síntomas similares a las crisis para manejarlos). 

Escribir comentario

Comentarios: 2
  • #1

    Kelsie Hermanson (sábado, 04 febrero 2017 03:07)


    Hi, the whole thing is going fine here and ofcourse every one is sharing information, that's genuinely fine, keep up writing.

  • #2

    Darla Lones (domingo, 05 febrero 2017 18:23)


    Asking questions are genuinely nice thing if you are not understanding something completely, but this article presents pleasant understanding even.